En muchos desarrollos de proyectos informáticos o ERP (Enterprise Resource Planning, Sistema de Planificación de Recursos Empresariales), se produce una insatisfacción en el cliente que suele traducirse en un incumplimiento de lo pactado en el contrato. Es decir, el cliente percibe que la empresa desarrolladora, a la que ha encargado su proyecto, no ha desarrollado lo pactado en el contrato. También puede ocurrir que sí se haya desarrollado lo contratado y sea necesario, para el proveedor, demostrar este extremo a partir de una demanda del cliente.
En cualquiera de estos casos, es muy importante realizar un informe pericial informático, por parte de un perito informático colegiado, que analice el contrato y las distintas funcionalidades implementadas o no implementadas, determinando si el contrato se cumple o no se cumple. Suele ocurrir que, en demasiadas ocasiones, no existe contrato o el contrato no tiene un anexo de Especificación de Requisitos del Software, o este anexo es muy parco.
Aquellos proyectos en los que no existe contrato o el anexo de Especificación de Requisitos del Software es muy parco, representan un problema, pues los requisitos deben ser extraídos, habitualmente, de interminables cadenas de correos electrónicos. En estos casos, si se pretende demostrar que el desarrollo no se ha realizado de acuerdo con lo pactado, la tasa de éxito del pleito disminuye y el precio del informe pericial informático aumenta, porque la extracción de los requisitos es un trabajo extra.